Motoberfest, Algete ardió en el Motoberfest
El Sábado 25 se celebró en Algete (Madrid) una concentración de motos clásicas, no tan clásicas, conciertos y en definitiva verbena por todo lo alto.
Ha sido la primera edición, organizada por El Club Scooter Rata Negra y Motos Vinagre, salió todo a pedir de boca. Empezó sobre las 10:30 donde empezaron una ruta de unas dos horas. Entre las motos que hicieron rutas había vespas, lambrettas, montesas, alguna bmw clásica; entre ellas una tipo scramble preciosa, harleys.. Mientras que hacian la ruta, los organizadores terminaron los preparativos y sobre las 12 se abrió "la veda" de los bocadillos, cervezas (también tenían cerveza artesana) y demás. Empezaron a
llegar grupos de moteros que llenaron el recinto, sobre todo grupos de Harleys, bandas a lo americano que se disponían a pasar un Sábado fetén. El cuero negro se mezcló con las familias que por allí se dejaban ver, con sus hijos para que vieran motos que suenan, que huelen y que hacen ruido. Junto a la barra, lo más concurrido del espacio, para mover el bigote había también un espacio para los más pequeños, y varios expositores de tatuajes, de camisetas como Barba Riders, artesanía... Las motos más " de colección" las llevo uno de los organizadores, pero hubo cosas interesantes, sobre todo alguna Harley customizada a tope y algunas BMW convertidas. Por supuesto las Vespas lucian su mejor brillo.
La Jornada se alargó hasta las tantas de la mañana, incluso pusieron el Clásico en pantalla grande para después pasar al Rock and Roll de los grupos que asistieron a dar música de la buena al evento.
Para ser la primera vez que se celebrara salió muy pero que muy bien, con éxito de
público y motos. Una inciativa chachi para los vecinos de Algete y para todo el mundo que quisiera pasarse por la casa de la juventud. Aquella matinal moló, se juntaban los tipos duros de las Harleys, algunos modernistas con sus parkas cola de pez, niños alucinando con las motos y el Gato de la Villa, apoyando todo lo que sea auténtico y madrileño. Salió todo a pedir de boca, incluso dimos un baño a los del Barna en el Clásico. Esperamos que el año que viene organicen la segunda edición, ahí estaremos.
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